Albahaca: evita discusiones en la pareja. Amuleto para atraer riqueza. Inclina a la paz y comprensión de los seres humanos. La Albahaca como regalo trae buena suerte a un nuevo hogar, en especial si en él hay niños pequeños.

Cardo Santo: se utiliza como un componente importante en amuletos para romper hechizos. También tiene la facultad de dar paz si se esparce por un lugar o si se entrega a una pareja que tenga una disputa.

Espliego: atrae el amor y proporciona longevidad llevado en amuletos y oliéndolo a menudo. ¡Excelente purificador! Esparcir por toda la casa para mantener la tranquilidad; y también en los balcones o galerías.

Mandrágora: raíz mágica por excelencia, utilizada por magos para rituales de protección y para todo tipo de peticiones. Depuradora de malas energías, por ello se puede utilizar como limpiadora quemando unos gramos sobre una pastilla de carbón. Ideal para protegerse de todo mal.

Pepitas de Calabaza: si se llevan en el bolsillo o en la cartera alejan el mal. Para protección y limpieza.

Romero: se utiliza como purificador para lugares o personas cargadas de negatividad. También es usado por los curanderos para ‘‘limpiarse’’ (frotar sus manos) después de su trabajo espiritual.

Rosa de Alejandría: potente útil en magia amorosa. Atrayente de vibraciones positivas al que las utilice, solamente llevándolas encima dentro de un saquito. Amor, adivinación amorosa y suerte. Muy adecuada llevarla cerca en los viajes.

Ruda: protección y limpiezas espirituales. También se usa para quemar en un altar mientras se reza solicitando salud. Exorcismos.

Salvia: dispersa las malas vibraciones y los espíritus malignos. Muy útil para limpieza de chakras y exorcismos. Una pequeña bolsa con Salvia nos servirá como potente amuleto contra el mal de ojo, así como para atraer el dinero y el amor.

Tomillo: se quema para rezar solicitando buena salud. Rompe con los hechizos de enfermedades. Hierba purificadora espiritual. Ponerla en varios lugares de la casa o lugar de trabajo.

Verbena: muy indicada en lugares muy concurridos, especialmente laborales, ya que disipa las energías negativas y las posibles divergencias. Ahuyenta los malos espíritus y las fuerzas malignas.